Nosotros nos amurallamos la
Vida.
Las culpas las buscamos siempre FUERA, pero quien levanta las separaciones; quien crea las limitaciones somos nosotros.
Nuestros pensamientos son los que nos limitan.
¿Está cómodo el sujeto detrás de su muralla?
Posiblemente no se sienta cómodo. Mirá con tristeza la
Vida que de desarrolla más allá de sus muros.
Pero se siente seguro.
Ese es el concepto que nos aprisiona y nos hace levantar murallas: La
SEGURIDAD.
Y la seguridad no existe. En esta vida pocas seguridades tenemos, excepto la
muerte y los
impuestos.
Por las expectativas de seguridad muchas veces nos perdemos la
Vida, nos perdemos el disfrutar ese tiempo único y valioso que la
Creación nos está proporcionando.
No sabemos si habrá una segunda oportunidad.
No podemos tener certezas de nada.
Sólo tenemos el
AHORA.
Fundámonos y hagásmoslo vibrante y
ETERNO.
Para eso hay que derribar TODOS los muros que hemos alzado para protegernos, y
ATREVERNOS A VIVIR.
Y HOY mejor que MAÑANA.
Un abrazo desde el corazón.